lunes, 22 de octubre de 2012

Monseñor Ferrer: mutua influencia entre los misales

Durante su visita al Seminario Mayor San José de La Plata, Argentina, Monseñor don Juan Miguel Ferrer Grenesche, Subsecretario de la Congregación para el Culto Divino y la Disciplina de los Sacramentos, hizo un encendido llamado a cuidar la Liturgia “que es de Dios, y no de los hombres. Una liturgia manufacturada no vale para nada, porque es cosa nuestra. Podrá ser muy bonita y divertida pero no es de Dios. Y ‘sin mí, no podéis hacer nada’, nos recuerda el Señor”.

Alentó a los formadores y seminaristas a vivir apasionadamente la formación litúrgica en el Seminario, “que es la tarea más hermosa. Pues aquí, en gran medida, se juega el futuro de la Iglesia. Recuerden siempre lo que les pide el Papa, queridos seminaristas: lo más importante es la relación personal con Dios, en Jesucristo. ¡Hacen falta mártires; testigos auténticos del amor de Dios!... "

"...durante toda su vida como teólogo, con anterioridad a su elección como Sumo Pontífice, el Papa nos enseñó la centralidad de Dios en la liturgia. Y hoy nos insiste con su ejemplo de liturgo, en la actitud ante la liturgia. Es, principalmente, su modo de celebrar el que demuestra la centralidad de la liturgia en la vida de la Iglesia”.

...Por ello, enfatizó, “celebrar los sagrados misterios es lo más importante en la vida de cualquier sacerdote, obispo y el propio Papa. Y, además, la forma en que el Santo Padre celebra se constituye en el modelo perfecto para toda la Iglesia..."

"...es probable que vayan llegando normas sobre un mutuo enriquecimiento entre ambas formas del rito romano, la ordinaria y la extraordinaria".


4 comentarios:

  1. Esperemos que no se trate de un "aggiornamiento" del Misal de Juan XXIII.

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  2. Hay cosas que podrían ser muy útiles de incorporar en el Misal de Juan XXIII, como por ejemplo, las lecturas leídas en idioma vernáculo solamente (epístola, evangelio) con una traducción CORRECTA (no como las que usualmente existen hoy); introducción de la oración de los fieles en el lugar que corresponda, hecha por el propio celebrante o por el diácono (cuando existe Misa Solemne).

    Hay otras, pero creo que éstas son las principales.

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  3. Por otro lado, creo que hay MUCHAS cosas que colocar en el Misal de Pablo VI provenientes del otro Misal, en particular, las oraciones al pie del altar, y la eliminación de muchas cosas (plegarias eucarísticas, en particular, algunas bastante malas).

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  4. Que hagan lo que quieran con el Misal de Pablo VI, pero, por favor, que respeten la Misa de siempre.

    Los experimentos, con gaseosa.

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