Riposte Catholique publica un extracto de una entrevista a Monseñor Brunero Gherardini, Canónigo de la Basílica de San Pedro y Secretario de la Pontificia Academia de Teología.
"Benedicto XVI dando legitimidad al uso del Ordo antiguo, ha confirmado la unidad del Rito distinguiendo "forma ordinaria" y "forma extraordinaria". Que las cosas queden claras: es un poco difícil considerar como "extraordinaria" la forma clásica con la cual, durante siglos, la Iglesia ha expresado su culto público. Pero ésto no se opone a la doctrina sobre la unidad de ritos y la duplicidad de formas... La persona que se lance a un análisis rigurosamente crítico de las dos formas no tendrá normalmente dificultad en demostrar que la forma llamada "extraordinaria" se distingue sustancialmente, al menos en algunos pasajes, de la forma llamada "ordinaria"... Sabemos que el Ofertorio es una parte integrante del Sacrificio... Y, sin embargo, con el pretexto no demostrado e históricamente infundado de que se trataba de fórmulas recientes, nuevas, individualistas y litúrgicamente aberrantes, la Misa "de Pablo VI" abolió el Ofertorio... (Sin embargo) disponemos de manuscritos que prueban lo erróneo del análisis: el "Suscipe Sancte Pater", el "Deus, qui humanae substantiae", el "Offerimus tibi Domine", el texto "In spititu humilitatis", el "Veni sanctificator", el "Suscipe sancta Trinitas", son plegarias atestiguadas por manuscritos del siglo IX. No es necesario escribir mucho para demostrar que, con el Novus Ordo, algo íntimamente ligado a lo esencial y enraizado en la Tradición, ha disminuído".
Riposte Catholique
Paul VI avait-il le droit d'"abolir" l'Offertoire? Mgr Klaus Gamber, et d'autres bons théologiens et liturgistes avec lui, a répondu: Non. Voir son livre, préfacé par les cardinaux Oddi, Stickler et Joseph Ratzinger, "La Réforme liturgique en question", publié par les moines bénédictins du Barroux en 1992. Notamment le chapitre 3: "Le Pape a-t-il le droit de changer le rite?"
ResponderEliminarY encima, muchos sacerdotes ligeros de fe, lo abrevian aún más y levantan, en el Ofertorio, las dos especies simultáneamente con lo cual sólo dicen una vez: "Bendito seas Señor,... Cuando no, las ofrendas a Dios pasan en medio de unos cuantos cánticos ridículos y deslavazados y no se dice una sola vez: "Bendito seas Señor..." Y nuestros inhibidos obispos, que lo saben todo al respecto, de campo y playa.
ResponderEliminar