El motu proprio Summorum Pontificum contemplaba la creación de Parroquias Personales con uso exclusivo de la forma extraordinaria de Rito Romano. La posibilidad ha desaparecido con Traditionis Custodes por lo cual la última parroquia personal por fecha de creación es sin duda la de Winchester, en New Hampshire, erigida "in extremis" por Monseñor Anthony Libasci, Obispo de Manchester, el mismo 16 de julio pasado, fecha de la publicación de Traditionis Custodes.
La nueva parroquia personal supone además un nuevo apostolado para el Instituto del Buen Pastor en Estados Unidos, pues el obispo ha erigido también la casa canónica de dicho instituto.
Es este otro ejemplo de las arbitrariedades e incongruencias sobre las que se argumenta Traditionis Custodes, al volcar de forma indiscriminada acusaciones sobre los presbíteros y comunidades tradicionales cuando, por ejemplo, las parroquias personales son creación exclusiva de los obispos, además de otros templos y capillas que numerosos prelados han dedicado a la Liturgia tradicional sin el estatus de parroquia personal.
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