Oremos por las Hermanas Franciscanas de la Inmaculada, que están siendo hoy calumniadas y atropelladas en sus derechos por la Congregación para la Vida Consagrada y Sociedades de Vida Apostólica. La Santísima Virgen Inmaculada las sostenga en esta prueba y las defienda de la iniquidad y de la hipocresía de quienes estaban llamados por Dios para proteger y alentar la vocación religiosa, y no destruirla.
A los Franciscanos y a las Franciscanas no les queda otra que unirse a la Fraternidad San Pio X
ResponderEliminarLo que les queda es soportar el Martirio del que saldrán con mayor fuerza.
ResponderEliminarEs claro que lo que se busca es destruirlos. El Papa Francisco ya comento que de igual forma que Benedicto XVI podría abdicar. Esperemos que este Pontificado no sea largo.
ResponderEliminarQue sepan que no están solas. Las acompañamos con nuestra oración y con nuestras públicas denuncias de la iniquidad con la que están siendo tratadas por los lobos.
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