El de los Franciscanos de la Inmaculada era un instituto dinámico, misionero, con múltiples vocaciones, que celebraba la Liturgia en ambas formas del Rito Romano: ordinaria y extraordinaria. La intervención de Roma y el nombramiento de un comisario político-apostólico están a punto de destruir este hermoso proyecto vocacional.
Ante el clima irrespirable causado por el comisario, padre Volpi, entre 100 y 150 sacerdotes franciscanos de la Inmaculada, según recoge la web Rorate Caeli, habrían pedido a la Santa Sede la dispensa de sus votos pontificios y pasar a depender de obispos diocesanos.
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| Imagen de archivo de una toma de votos en los Franciscanos de la Inmaculada. Enlace |
Ya sé que es difícil, pero ¿no podrían estos frailes descontentos intentar fundar otro instituto Ecclesia Dei?
ResponderEliminarEs una verguenza, una de muchas que estamos viendo, pero al final triunfaran sobre sus perseguidores, tiempo al tiempo y, mientras tanto, misericordia con los maricas, como Schonborn, o con los adulteros, Kasper, insultos a los que somos antiabortistas, Secretario de la Conferencia Episcopal Italiana, etc, etc,.
ResponderEliminarLas personas responsables de la intervención a los Franciscanos de la Inmaculada, debieran tener presente que la medidas canónicas, si no me equivoco, tienen un fin medicinal, es decir, sanar, reconducir, etc. Si los resultados de la intervención canónica no consiguen ese fin sino que se convierten en contraproducentes entonces, entiendo yo, que se estará actuando equivocadamente. Por otra parte, no creo que se puede mantener perpetuamente a un instituto intervenido.
ResponderEliminarPor otra parte, teniendo presente que los Franciscanos de la Inmaculada no pertenecen a Ecclesia Dei y que, por lo tanto, están bajo los mismo responsables vaticanos que el resto de órdenes religiosas es, asombroso, por no utilizar otro calificativo, el agravio por comparación que se produce entre el trato que reciben los Franciscanos de la Inmaculada y el trato que reciben otras muchas congregaciones claramente heterodoxas que, no creo equivocarme diciendo que no están ni remotamente intervenidas.
No hay derecho. Estan torturando y acosando a los F.I. Inocentes mientras se tolera a los perversos.
ResponderEliminarNuestro Señor le pedirá cuentas a volpi y San Francisco no lo considerará hijo suyo en el momento del juicio... Será el mismo destino del papa Francisco?
ResponderEliminarY esto es obra de quien pregona , amor al prójimo, humildad, piedad, misericordia.
ResponderEliminarObediencia no porque siempre hace lo que le viene en gana. Ahora entiendo los comentarios de angustia de los lectores Argentinos advirtiéndonos de lo que se venia.
Saludos Cordiales
Exactamente. Los porteños conocemos bien a Bergoglio. Y nos desvivíamos hace un año por compartir esta experiencia y advertir lo que iba a suceder. Bergoglio es completamente inmisericorde con sus enemigos. Y entre ellos, el incluye a todos los institutos religiosos considerados de "derecha". Les tiene un encono muy especial. En Buenos Aires los persiguió a todos.
EliminarEsta va a ser la gran vergüenza con la que va a pasar a la historia el pontificado de Francisco. El de la humildad y sencillez.
ResponderEliminarPor favor por qué no intervienen a los jesuitas que estan desapareciendo de modo espeluznante y son miles de ancianos decrépitos en su arrolladora mayoría, en lugar de aniquilar a los Farnciscanos de la Inmaculada. POR EL AMOR DE DIOS !!!!
ResponderEliminarLo mas irónico del tema es que el se puso el nombre de Francisco y por otro lado es el autor intelectual de la destrucción de los Franciscanos de la Inmaculada quienes imitan el modus vivendi de San Francisco. ¿Qué se ponga a pensar un segundo de que lado estaría San Francisco?
ResponderEliminarSaludos Cordiales.