Tras la entrada en vigor del motu proprio Summorum Pontificum, las monjas del Carmelo del Sagrado Corazón de Jesús y de la Inmaculada, en Alençon, en Francia, comenzaron a celebrar la Santa Misa con la forma extraordinaria del Rito Romano los domingos y festivos, manteniendo la forma ordinaria para los días de diario.
La Madre Superiora lo explicaba en la revista La Nef, en el año 2010:
"Nuestra preferencia es por la forma extraordinaria, haciendo nuestro lo que dice André Frossard: "Encuentro que la nueva misa no es tan contemplativa, que hablamos demasiado en ella, y que el aspecto del misterio está bien reducido". La forma extraordinaria expresa mejor lo sagrado, el amor y el respeto. Es una liturgia "amorosa". Comparen por ejemplo las traducciones del misal Dom Lefebvre con las del misal moderno. El tono no es en absoluto el mismo. Hoy hablamos a Dios de igual a igual, o casi. Para nosotros no es para nada una cuestión de estar ligadas a un tiempo pasado. No somos nostálgicas. En cuanto al futuro de esta cuestión, como hijas de la Iglesia, nos apoyamos en Su Santidad Benedicto XVI".
Ahora, en 2013, estas monjas carmelitas han obtenido el poder usar en exclusiva la Liturgia tradicional, habiendo obtenido el permiso de su Obispo, Monseñor Jacques Habert, Obispo de Sées. La Misa con el misal del Beato Juan XXIII se celebra los domingos y festivos a las 9 horas, y los días de diario a las 8 horas. El capellán es un presbítero diocesano, ayudado por los sacerdotes de la Fraternidad de San Pedro.
Alencon es el pueblo natal de Santa Teresa del Niño Jesús y de la Santa Faz, Doctora de la Iglesia. Aunque sus restos mortales reposan en Lisieux, donde también vivió y en cuyo Carmelo vivió y murió, alcanzando allí gloria eterna. El texto de la Madre Superiora, apoyada en palabras del converso Frossard, encuadra perfectamente el estado de la cuestión.
ResponderEliminarA nuestras Carmelitas "maravillosas", tan admirables por tantas cosas, ¿siquiera se les pasa esto por la cabeza?
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