Gracias a Dios por darnos pastores como este, preocupados por la gloria de Dios y la santificación del pueblo que se le ha encomendado, sin atender a los agravios contra su persona ni titubear al momento de anunciar a Cristo y denunciar las injusticias y la herejía.
Dios bendiga al Cardenal Cipriani y multiplique los frutos de su ministerio.
¡Qué gran Papa si no hubiera un colegio cardenalicio entregado, en su mayor parte, a las cosas de este mundo!
ResponderEliminarGracias a Dios por darnos pastores como este, preocupados por la gloria de Dios y la santificación del pueblo que se le ha encomendado, sin atender a los agravios contra su persona ni titubear al momento de anunciar a Cristo y denunciar las injusticias y la herejía.
ResponderEliminarDios bendiga al Cardenal Cipriani y multiplique los frutos de su ministerio.