viernes, 17 de febrero de 2012

Coram Episcopo

La web Salvem a Liturgia! publica un interesante artículo en lengua portuguesa, que trata de la asistencia de un obispo a la Santa Misa oficiada por otro sacerdote. Y contempla ambos casos: las formas extraordinaria y ordinaria del Rito Romano, por lo cual es interesante porque puede ayudar a organizar la asistencia de un prelado a Misa en su visita a alguna parroquia o comunidad.

En la forma extraordinaria no hay concelebración. En la forma ordinaria la concelebración es lo habitual, sin embargo puede haber casos que aconsejen que el obispo presida sin oficiar: por ejemplo para dar protagonismo a un sacerdote que celebre su aniversario sacerdotal, o las exequias de un familiar cercano.

Añadimos nosotros que tras la reforma litúrgica la opción de concelebrar se convirtió en casi obligatoria, de manera que muchos obispos y sacerdotes no saben asistir correctamente a la Santa Misa en coro. Y, sin embargo, qué bueno y conveniente para una mayor valoración del misterio eucarístico es que -como hicieron los Papas a lo largo de la historia- también en ocasiones los obispos y presbíteros asistan a la Misa oficiada por un hermano en el sacerdocio.



Entrada de un obispo para asistir a Misa con la Forma Extraordinaria


El Beato Juan Pablo II asistió en numerosas ocasiones a Misa, con la
Forma Ordinaria, en los últimos años de su pontificado,
debido a sus problemas de salud.

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