En Épila, Zaragoza, España, se celebraron rogativas a Nuestra Señora de Rodanas, el pasado mes de noviembre, para impetrar la lluvia, muy necesaria, porque la zona es notablemente agrícola, y los agricultores ya desistían de sembrar y daban por perdida la cosecha.
El rito fue tomado de los libros antiguos y se cantó íntegramente en latín y gregoriano. Fue presidido por el reverendo don Miguel Ángel Barco.
La Virgen concedió la lluvia, Y abundante. La Santa Misa de acción de gracias, se ofició también con la Forma Extraordinaria del Rito Romano. Las fotografías corresponden a ambas celebraciones.
¿Será verdad que a Dios le agrada más la liturgia tradicional?
ResponderEliminarSegún el Santo Padre, no; a Dios le agrada el culto "en espíritu y verdad", ya sea vetus ordo o novus ordo.
ResponderEliminarY añado: fue la fe del Sr. Cura Párroco y la de los fieles la que alcanzó del Cielo la tan deseada lluvia, por intercesión de la Madre de Dios. Fue la fe con la que imploraron, no el latín o la lengua castellana.
ResponderEliminarJan: ¿eso se lo ha contado Dios? Lo parece por la seguridad con que habla Vd.
ResponderEliminarY, por cierto, la diferencia entre la liturgia tradicional y la liturgia Novus Ordo no es sólo de idioma; es también de acento. En la tradicional está mucho más marcado el espíritu de adoración de alabanza a Dios, por ejemplo.
ResponderEliminarLo importante es sin duda la fe. Se puede oficiar la misa con piedad y devoción con cualquiera de las dos formas del rito romano. Yo no creo que en este artículo se haya dicho que la lluvia fue concedida por oficiar con el misal antiguo. Una cosa es que se rezara pr la lluvia, y otra que se hiciese en latín y con el modo extraordinario. Ahora bien. Como en esta página web se recoge toda noticia que atañe a la misa tradicional, pues me parece estupendo que se haga mención de estas celebraciones.
ResponderEliminarSoy el autor del primer comentario. Ya sé que el artículo no dice que la lluvia vino por oficiar con la liturgia antigua, pero como conozco a gente que piensa que la Misa tradicional es la que más agrada a Dios, me pareció que venía al caso que nos los planteásemos.
ResponderEliminarA Dios le debe gustar las cosas hechas con amor, con respeto, con devoción. Y parece que en este caso, se hizo así, pues el cielo respondió a las súplicas. Por lo que sí podemos decir algo concreto: a Dios no le debió desagradar como se realizaron estas rogativas. Por lo tanto no parece que se le ofenda utilizándolo.
EliminarLa verdad es que los sacerdotes, en muchas ocasiones, se olvidan de dar formación a sus fieles, que asisten a la Santa Misa. ¿De qué nos vale que se hagan reformas en la liturgia, más o menos profundas si los obispos y los sacerdotes no explican a sus fieles el sentido de los cambios?
EliminarEs una pena que una misa que se ha celebrado durante tantos siglos, y que tanto bien ha hecho a la Iglesia, se intente presentar ahora como algo que ya no vale.Una piedra preciosa vale siempre incluso envejecida. Y si hablamos por ejemplo del vino, cuantos más años, más solera. Y de los ancianos: cuantos más años, más experiencia. Pero ahora parece que se ha descubierto el MODO PERFECTO DE CELEBRAR LA MISA. Así que al parecer ser, hemos estado 2.000 años perdiendo el tiempo.
ResponderEliminarA Dios le debe gustar las cosas hechas con amor, con respeto, con devoción. Y parece que en este caso, se hizo así, pues el cielo respondió a las súplicas. Por lo que sí podemos decir algo concreto: a Dios no le debió desagradar como se realizaron estas rogativas. Por lo tanto no parece que se le ofenda utilizándolo.
ResponderEliminarA Dios la gloria y la Alabanza por los siglos de los siglos!
ResponderEliminarQue duda cabe, no hay comparación posible entre la Forma Extraordinaria y la que nos han acostrumbrado, he crecido con el Novus Ordo,me acerca a Dios mucho más una sola Misa Extraordinaria que varias del Novus Ordo, y llevo la misma disposición, es incomparable, por todo ello y mucho más Viva el Santo Padre
También he crecido con el novus ordo, soy muy cercano a muchos sacerdotes en cuanto soy monaguillo y he visto celebrar el novus ordo de las mil maneras posibles, cada quien hace lo que quiere, agregan o quitan cosas a más no poder, no tengo la dicha de asistir a la misa en su forma tradicional pues en mi país han hecho caso omiso al Santo Padre. Pero si rezo el rosario en latín completo con todo y las letanías y sus oraciones propias y no se compara en verdad entre rezarlo en latín o en castellano. A pesar de como usted dice de hacerlo con la misma disposición. Desde Venezuela. Ronald.
EliminarSoy el responsable del segundo y tercer comentarios a esta noticia. El Novus Ordo, debidamente celebrado siguiendo las rúbricas litúrgicas -como lo celebra el Santo Padre, por ejemplo- es tan válido, y alcanza gracias del Cielo tanto como el Vetus Ordo. En ningún momento discuto el valor de las rogativas y de la celebración de la Misa en latín... Pero el latín, el vetus ordo o el gregoriano no causaron la lluvia, sino la fe con la que el presbítero y los fieles acudieron en su necesidad al Señor, implorando la lluvia por intercesión de la Virgen.
ResponderEliminarSe me olvidaba decir que, precisamente, lo que más me conmueve de esta noticia es, por una parte, que este valiente sacerdote haga rogativas para pedir la lluvia, posiblemente haciendo caso omiso de tanto inepto (muchos, lamentablemente, católicos) que se habrán reido de él, acusándolo de creerse el chamán de una tribu; por otra, que la fe -hoy como en tantos casos como nos refiere el Santo Evangelio- alcance la gracia -en este caso las lluvias tan necesarias- de la misericordia del Señor; y por último, que se haya acudido a la Virgen y Ella, una vez más, haya actuado como Madre, intercediendo en favor de sus hijos, que miraban con preocupación las tierras resecas.
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