El boletín del Oasis de Jesús Sacerdote nos trae una excelente noticia: la fundación de un nuevo monasterio tradicional de monjas de clausura, en Villaviciosa, Córdoba, España.
El nuevo monasterio, llamado Oasis de San José, ha sido fundado con cinco monjas del Oasis de Jesús Sacerdote, en Barcelona. Que llegaron a Villaviciosa el pasado 26 de noviembre. Una española, una mexicana, una colombiana, una argentina y una francesa. El padre fundador ofició la Santa Misa en la forma extraordinaria, en la ermita de Nuestra Señora de Villaviciosa y acto seguido las hermanas del Oasis subieron a la propiedad.
Laus Deo!
ResponderEliminarEn medio de tanta confusión un nuevo Faro se enciende. Un Monasterio de Clausura nos garantiza la bendición de Dios sobre su pueblo, de manera especial la diócesis de Córdoba. Dios premie a las Hermanas de este nuevo Oasis con abundantes vocaciones que quieran entregar sus vidas como ofrenda por los sacerdotes y almas consagradas.
Mi oración por tan queridas hermanas.
Pax.
Magnífica noticia. Ahora necesitamos un monasterio masculino.
ResponderEliminarPues éste mismo año, Dios mediante, se funda la Rama Masculina. YA hay una vocación de Santo Domingo. Hay dos españoles, otro dominicano, un bolivariano, un mexicano y tres de EE. UU. que quieren venir a mediados de este mismo año 2014.
EliminarHermenegildo, si quieres venirte a jugarte la vida por Cristo, eres bienvenido.
Unidos en oración.
La tradición es la salvación de la Iglesia y de cualquier otra Religión. En la Obra de Teatro de cultura semita el Violinista del Tejado el mensaje es claro, cuando le preguntan como es que la religión Judía ha perdurado tantos años el violinista responde; el secreto esta en transmitir nuestra Tradición de generación en generación sin tradición no hay Religión y comienza a cantar.
ResponderEliminarInclusive las congregaciones religiosas que no han abandonado el habito y su ora et labora. conforme a su regla siguen en pie y con vocaciones. No entiendo porque muchos se aferran a la desaparición de la vida religiosa, tal parece que la P2 penetro todo el Vaticano.