Monseñor Salvatore di Cristina, Arzobispo de Monreale, en Sicilia, Italia, ha dado orden de que los sagrarios de las iglesias queden vacíos debido a los continuos actos sacrílegos que se vienen perpetrando en varias ciudades de su archidiócesis. El Santísimo Sacramento ha sido retirado de todos los tabernáculos para evitar nuevas profanaciones. Se harán turnos de adoración eucarística, al final de los cuales la Sagrada Forma sea consumida o reservada en el lugar más seguro posible. La medida cuenta con la aprobación de la Santa Sede.
Rorate Caeli
Le aseguro, porque he estado allí, que Monreale, como el resto de Sicilia, está en Italia.
ResponderEliminarGracias por advertir del lapsus. Saludos
EliminarPrudente decisión la del obispo; pero triste, porque si se llega a eso, es porque ya no se adora a Cristo, sino que se le odia. Dios perdone a esos insensatos que profanan lo más sagrado del mundo.
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